Guía de Mindfulness: Cultivando la Paz Interior

 

El mindfulness, también conocido como atención plena, ha sido practicado durante siglos en diversas culturas alrededor del mundo como una forma de encontrar paz y claridad mental en medio de las tribulaciones de la vida. A continuación te cuento un poco su historia, cómo lo descubrí y lo incorporé en mi vida diaria, junto con una pequeña guía para iniciarte. ¡Vamos allá!

¿Qué es el Mindfulness?

El mindfulness tiene sus raíces en la antigua tradición budista, en Kapilavastu (norte de la India y actual Nepal), donde se conoce como "sati", que significa "atención" o "conciencia". Esta práctica se remonta a más de 2.500 años atrás, cuando Siddharta Gautama Buda enseñó técnicas de meditación para cultivar la atención plena y la comprensión profunda de la naturaleza de la mente y la realidad.

Aunque el mindfulness tiene sus raíces en el budismo, se ha extendido más allá de esta tradición religiosa y se ha convertido en una práctica secular que es accesible para personas de todas las creencias y trasfondos culturales. En la década de 1970, Jon Kabat-Zinn adaptó estas técnicas budistas en un programa de reducción del estrés basado en mindfulness, conocido como el Programa de Reducción del Estrés Basado en Mindfulness (MBSR, por sus siglas en inglés), que ha ganado popularidad en todo el mundo como una forma eficaz de mejorar la salud mental y el bienestar emocional.

Siddharta Gautama Buda

Mi experiencia con el Mindfulness

En mi propia experiencia, descubrí el mindfulness en un momento en el que mi mente estaba saturada de pensamientos, ruido mental, ansiedad y estrés crónico. Necesitaba desesperadamente escapar de ese caos de preocupaciones y encontrar una manera de estar en paz conmigo misma y con el mundo que me rodeaba. Fue entonces cuando me adentré en el mundo del mindfulness y descubrí el poder de vivir con plena conciencia en el momento presente.

Inicialmente, comencé practicando mindfulness de forma autodidacta, dedicando unos minutos cada día simplemente a la meditación y la atención plena. Con el tiempo, noté cómo mi mente se volvía más serena, cómo el estrés disminuía y cómo comenzaba a experimentar una mayor sensación de calma y bienestar en mi vida diaria. Entonces, decidí profundizar un poco más en mi práctica y realizar una formación, donde aprendí más técnicas y profundicé mi comprensión de esta poderosa herramienta de autotransformación.

Hoy, el mindfulness es una parte esencial de mi vida diaria. Me ayuda a gestionar el estrés, la ansiedad, a encontrar claridad mental en momentos de confusión y a cultivar una mayor paz interior en medio del ajetreo del día a día. Todos podemos beneficiarnos de la práctica del mindfulness, y es por eso que decido compartir esta pequeña guía contigo. ¡Espero que te inspire a incorporar el mindfulness en tu vida y a descubrir la paz que aporta!

Guía de Mindfulness básica para el día a día

1. Comienza con la Respiración: La respiración es nuestra ancla en el presente. Tómate unos minutos al día para simplemente observar tu respiración, sintiendo cómo entra y sale el aire de tu cuerpo. Esto te ayudará a calmar tu mente y a conectarte con el momento presente. Te digo como hacerla correctamente: Debes permitir que tu estómago se expanda mientras inhalas, respirando a través del diafragma en lugar de llevar la respiración a la parte superior del pecho. Luego retén el aire 4 segundos y exhala lentamente vaciando tus pulmones. Aquí te lo dejo más visual:

                                                       

2. Observa tus Pensamientos: En el mindfulness, no se trata de detener los pensamientos, sino de observarlos con atención y sin juzgar. Permíteles pasar como nubes en el cielo, sin aferrarte a ellos ni identificarte con ellos. Esto te ayudará a desarrollar una mayor claridad mental y una mayor perspectiva sobre tus pensamientos y emociones.

3. Conecta con tus Sentidos: Toma un momento para conectar con tus sentidos, observando lo que te rodea con atención plena. Observa los colores, las texturas, los sonidos y los olores a tu alrededor, sin etiquetar ni juzgar. Esto te ayudará a conectarte con el mundo que te rodea y a encontrar belleza en los pequeños detalles de la vida.

4. Practica la Gratitud: La gratitud es una poderosa práctica de mindfulness que nos ayuda a enfocarnos en lo positivo en nuestras vidas. Toma un momento cada día para reflexionar sobre las cosas por las que estás agradecido/a, desde las personas que te rodean hasta los pequeños momentos de alegría y belleza. El Journaling también es una maravillosa herramienta para estar presentes y además, te ayudará a cultivar una actitud de aprecio y satisfacción en tu vida diaria.

Ritual Diario de gratitud

5. Pintar mandalas o fraktales: Concéntrate en el proceso mientras pintas y en las sensaciones que experimentas. Puedes coger imágenes de internet para imprimir o bien comprar un libro. Coge unos colores y ¡Fluye sin más!

                                     

6. Paseos conscientes: Sal a dar un paseo y lleva tu atención al momento presente. Observa cómo caminas, sé consciente de ello (¿Vas erguido o encorvado/a? Presta atención a tu postura), las sensaciones, colores, formas a tu alrededor. Intenta no dejar que tu mente divague por el pasado ni el futuro, solo mantente en el presente.

7. Yoga: El Yoga es otra maravillosa práctica para conectar con tu cuerpo y prestar atención a las sensaciones y el movimiento consciente del cuerpo. Además de contribuir a mantener tu cuerpo en forma, también promoverá la calma mental y la relajación corporal.

8. Acepta el Presente: El mindfulness nos enseña a aceptar el momento presente tal como es, sin resistencia ni juicio. Reconoce que la vida está llena de altibajos y que no siempre podemos controlar lo que sucede a nuestro alrededor. Acepta las cosas tal como son y confía en tu capacidad para enfrentar los desafíos de la vida con calma y resiliencia.

El mindfulness nos invita a vivir con plena conciencia y atención en el momento presente. A través de la respiración, la observación de nuestros pensamientos, la conexión con nuestros sentidos, la práctica de la gratitud, el yoga, la pintura y aceptando el momento presente, podemos cultivar la paz interior y la claridad mental que tanto anhelamos en el ajetreo diario.

Espero que esta mini guía te inspire a incorporar el mindfulness en tu vida diaria y a encontrar la serenidad que buscas. Te dejo en el anexo unas mandalas imprimibles.

Awen

Anexo: Mandalas para imprimir y colorear